martes, 1 de mayo de 2012

Capítulo 43


Ultimo cap por hoy porque mañana vuelvo a mi casa. Creo que mañana solo puedo subir cap a la noche. Asi que firmen mucho :)  Besos besos. Muchas gracias a las que siempre firman y me hablan por twitter. Las quiero mucho, son todas unas genias! ♥ Buenas noches.


Quería poseerla, pero algo lo frenaba. ¿Qué sería?, ¿miedo?, ¿inseguridad quizá? Cuando to­caba a Lali, se sentía poderoso, como si pudiese dominar el mundo. Pero también se sentía muy vulnerable, como si le pudiesen partir el cora­zón. Si le hacía el amor, no habría vuelta atrás. Estaba seguro de que se enamoraría de Lali.

Capítulo 43
—¿En qué piensas? —le preguntó ella. Sus palabras lo sorprendieron. De pronto, se dio cuenta de que Lali estaba totalmente desnu­da y él vestido.
—En lo suave que es tu piel —Peter se acer­có a ella y aspiro—. Y en lo bien que hueles. También pensaba en lo que quiero hacerte sen­tir.
—Hazme sentir —dijo ella.
Peter sonrió. Luego, pasó las manos por sus caderas, por el vientre. Cuando bajó, Lali contu­vo la respiración. Después, la rodeó por los muslos y la acercó hasta situarla entre sus piernas.
Lali tembló cuando la tocó y Peter notó el poder que tenía sobre ella. Se pregunto si sería consciente del que ella tenía sobre él, si sabía cuánto le costaba negar su deseo. Tenía los de­dos húmedos y empezó a pasearlos sobre el sexo de Lali, despacio al principio, estimulándo­la.
Peter la miró. Sonreía. Estaba más guapa de lo que por sí ya era. Se había ruborizado y tenía los pechos sonrosados. Lali se apretó a él, le apretó los hombros, arqueó la espalda. Casi sin respiración, murmuró su nombre. Pero Peter no quería provocarle el orgasmo todavía, de modo que aminoró el ritmo, sabedor de que cuando finalmente llegase, sería más explosivo.
Su rostro se tensó. Peter sabía que estaba al límite y le metió un dedo. De repente, un espasmo sacudió su cuerpo. Lali emitió un ge­mido desgarrado, gritó su nombre y, de re­pente, se desplomó sobre él encima de la cama. Lentamente, fue recuperando la respira­ción.
—Creía que me ibas a acostar —dijo tras sol­tar una risilla.
—Pensé que te vendría bien relajarte un poco —Peter la agarró por la cintura y ambos rodaron sobre el colchón hasta tenerla situada boca arriba. Se agachó para besarla—. Debería irme.
—¿Por qué? Quédate.
—¿Por qué? —Peter suspiró.
—No sé —dijo ella con el ceño fruncido—. Porque quiero que te quedes.
—Esa es la única razón que se me ocurre a mí también. Y, de momento, creo que no es suficiente —Peter se levantó de la cama y agarró el camisón—. Venga, te arropo antes de irme — añadió al tiempo que la ponía de pie.
—¿No quieres pasar la noche conmigo? — preguntó confundida ella.
—Por supuesto que quiero. No imaginas cómo.
—¿Entonces?, ¿por qué te marchas?
—No tengo ni idea —contestó mientras le po­nía el camisón—. Pero hazme caso: es mejor que me marche. Es nuestra primera cita. Deberíamos seguir al menos alguna de las reglas... Métete — añadió tras abrir la sabana.
—¿He hecho algo mal?
—En absoluto. Pero las cosas no tienen porqué ir siempre a velocidad de vértigo —Peter sonrió—. A veces merece la pena esperar,
—Normalmente estaría de acuerdo. Pero, ¿has olvidado lo que hicimos la primera noche en la limusina?
—No, eso no es fácil de olvidar. Pero enton­ces éramos dos desconocidos y ahora no lo somos. Y esta ha sido nuestra primera cita. No creo que debamos dormir juntos.
—Teniendo en cuenta lo que acabas de ha­cerme, ¿no te parece un poco absurdo? —Lali se metió en la cama y se subió la sábana hasta la barbilla—. Dame un beso de buenas noches. Y prométeme que me llamarás mañana por la ma­ñana.
—Dulces sueños —Peter se agachó para ro­zarle los labios—. Mañana te invito a desayunar. Luego podríamos ir a la iglesia. Hace un tiempo que no me confieso y tengo muchos pecados acumulados. Pecados buenos, no malos.
Lali estiró un brazo y le hizo una caricia en la mejilla.
—Eres un buen hombre, Peter Lanzani. Pero a veces me desconciertas.
La besó de nuevo. Luego fue hacia la puerta y le apagó la luz.
—No sé qué tienes de especial, pero tienes algo —murmuró antes de marcharse.
Después se dio la vuelta y sacudió la cabeza.
Aquello sí que era nuevo: no era normal que dejase escapar a una mujer bella y desnuda que le pedía acostarse con él. Pero debía confiar en su instinto y el corazón le decía que cometería un error si se enamoraba de Lali Espósito. Y si le hacía el amor esa noche, le estaría haciendo justamente eso: el amor. Necesitaba ir con calma.

11 comentarios:

  1. me encanto el capitulo! :D
    Peter no quiere darse cuenta... pero ya esta enamorado! :P jajaja

    otro capi prontito! :D

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  2. quiero más capitulos !!

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  3. MAS NOVE! Seguila pronto que esta muy buena! y ojala puedan llegar a estar juntos mas rapido de lo esperado.....

    Andre
    @Complicidad_lyp

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  4. que asquete lo del dedo

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  5. DEMASIADOO BUENOOOOO!! SUBEE MAS CAPITULOSS =)
    @BelenCorbera

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  6. Buenisimo!!!!! :D Buen retorno!!!!

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  7. Lina (@Lina_AR12)1 de mayo de 2012, 22:13

    Maravilloso!Este Peter es un caso serio!A la iglesia,jaja!me hizo reir.

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  8. Más novelaaaa! me encanta

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  9. Awwww a su manera fue re tierno, me muero con este chico!!! Es mas jndjsnxjsdjfskjds lo amoooooo y a está Nove también :D @LuciaVega14

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