Holaaa :) Si hay firmas antes o despues de La Dueña subo otro cap! besos chicas ♥
Peter sintió una ligera presión el pecho. No le gustaba como empezaban
las cosas.
Capítulo 57
Los manifestantes parecían un poco exaltados y los periodistas estaban
más interesados en ellos que en Soler. Trató de entablar contacto visual con Lali
pero esta se había pegado a su jefe y le susurraba algo al oído. Luego se
dirigieron a la pequeña plataforma que habían instalado en el embarcadero.
—¡Arriba el puerto! —empezó a corear la multitud—. ¡Abajo el proyecto Marat!
Lali se obligó a sonreír mientras se situaba frente al micrófono. Pero,
al ir a presentar a Soler, se desencadenó la batalla. Algo voló sobre la
multitud y cayó en la plataforma. En seguida, empezaron a lanzarse más objetos
contra Soler. Sólo entonces advirtió Peter que le estaban tirando peces muertos
y, a juzgar por el olor, podridos desde hacía unos días.
—Vuelve a la furgoneta —le gritó a Bernardo—. Vanesa, sigue grabando.
Peter se abrió paso entre los manifestantes mientras estos invadían la
plataforma. Los periodistas se retrasaron por miedo a recibir el golpe de
algún pescado. Ricardo Soler ya había desaparecido tras un muro de
guardaespaldas, pero había dejado a Lali sola, para que se defendiera como
pudiese.
—Ven —le dijo cuando llegó a ella, que todavía intentaba aplacar los
ánimos de la multitud—. Tienes que salir de aquí.
—¡No!
Peter maldijo, se agachó y la levantó en brazos. Sin darle tiempo para
reaccionar, enfiló hacia la furgoneta, donde Bernardo los esperaba con la
puerta abierta.
—¡Bájame! —exigió Lali, pataleando—. ¡Puedo controlar la situación!
—Ni loca —contestó Peter.
—¡Peter, suéltala! —gritó Pablo antes de que alcanzaran la furgoneta—. No
te hagas el héroe. Ya sabes lo que pasa.
Peter no hizo caso a su padre ni al pescado que le golpeó en un hombro.
Otro pescado aterrizó un segundo sobre la cabeza de Lali.
—¿Se puede saber qué haces? —exclamó ella una vez dentro de la furgoneta.
—Salvarte el pellejo.
—No pienso dejar que me intimiden —replicó Lali—. Si de verdad quieres
ayudarme, ¿por qué no has llamado a la policía para que dispersen la
manifestación?
—No había tiempo.
—Seguro que te lo estás pasando bomba — contestó ella—. Para ti será un
notición.
—¿Crees que quería rescatarte? —preguntó Peter irritado—. Antes me pondría
un ancla en el cuello y me tiraría al fondo del mar. Ahora tengo que casarme
contigo.
—¿Qué? —preguntó anonadada Lali.
—La maldición —Peter se mesó el cabello—. Te he salvado la vida, se
acabó. Ya no hay marcha atrás.
—No digas tonterías. No me has salvado la vida. Nadie se muere porque le
caiga un pescado podrido.
—Bueno, pero te he salvado de una situación peligrosa. Más de una vez.
Cinco o seis si llevo bien la cuenta.
—¿Y por eso tengo que casarme contigo? Estás loco.
—No depende de ti ni de mí —contestó él—. Es la
maldición de los Lanzani. Ya está decidido.
—Eh... —Bernardo carraspeo—. ¿Queréis que os deje solos?
—Aunque no me parece tan mala idea — continuó Peter sin hacer caso al
conductor—. No negarás que hay algo entre nosotros. Y algo más que una mera
atracción sexual.
—Te equivocas. Y sabes que estás equivocado —Lali negó con la cabeza—. A
ti lo que te gusta es la conquista. Vas detrás de mí igual que vas detrás de
una noticia. Pero una vez me conquistes, te fijarás en otra mujer, cualquier
mujer más guapa o más interesante, alguien que consiga retener tu atención más
tiempo que yo.
—No es verdad.
—Sí, definitivamente, os dejos solos —Bernardo abrió la furgoneta.
—¡No! —gritó Lali—. Soy yo la que se va — añadió justo antes de
escabullirse y saltar fuera para echar a correr entre los manifestantes hacia
la segunda limusina.
Peter la miró, dispuesto a acudir en su ayuda si alguien intentaba
detenerla. Pero los manifestantes parecían darse por contentos con haber
saboteado el acto y se limitaron a lanzarle insultos. Nada más entrar en la
limusina, el conductor arrancó, pisando a fondo el acelerador.
—¿Acabas de pedirle que se case contigo? — preguntó Bernardo.
—No —contestó Peter.
—¿Estás seguro?
—Le he dicho que me iba a casar con ella — matizó—. No se lo he pedido.
Hay una diferencia.
Continuará...
Subi otro cap plis,m encantan!! Eres una genia!!
ResponderEliminarJajajajaja este Peter y si se lo afirmo se casan y punto! Igual conociendo a esta Lali un "poquitico" terca, se la va a seguir haciendo difícil...
ResponderEliminarUna vez mas ME ENCANTA y subí cuando podas pero subí.. ;)
Andre
@Complicidad_lyp
Casorio Laliterrr!! <3 jajaja
ResponderEliminarmas nove!!!!!!!!!!
me encanta esta nove!!! :D
ResponderEliminarya quiero otro capi :P
mas nove
ResponderEliminarLA MALDICION de Los Lanzani q en definitiva no es tan maldita,gracias a ella todos los hnos conocieron el amor#AGUANTE MALDICION LANZANI
ResponderEliminarTambien me voy a ver La Dueña!
wfidjiqewlfjlwrjefjlqefjilejilfjlqjiljflqijfjlqijlfjqeljfilqeijflqjlqfql no se si me explico... =$ ♥ kwjdlqewfjlqewj MORIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII ACA @LuciaVega14
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