Holaa :) Paso rapido porque estoy sin tiempo... pronto cuando tenga más tiempo subo más de una vez al día. Disfruten y comenten!! besos ♥
Al llegar al vestíbulo
volvió la cabeza y le gritó a Peter:
—¡El repartidor está
aquí, mi príncipe, baja con la cartera!
Sin embargo, cuando
abrió la puerta, con quien se encontró fue con otra persona.
Capítulo 17
Peter bajó las escaleras
vestido sólo con los pantalones, que se había puesto a toda prisa cuando oyó
que Lali lo llamaba, y estaba sacando ya un billete de veinte de la cartera
cuando vio a Carlos Espósito entrando en su casa, y se paró en seco en uno de
los últimos escalones.
Lali se había puesto
pálida y sus manos alisaban nerviosas el tejido de rizo del albornoz.
—¿Cómo has podido hacer
algo así? —le dijo su padre en tono furioso.
Peter bajó otro escalón,
pero el hombre o no se percató de su presencia, o no le importó. Ni siquiera
dio tiempo a Lali para explicarse.
—¿De verdad creías que
iba a permitir que me desafiaras de esta manera y que iba a quedarme de brazos
cruzados?
—No era mi intención
desafiarte —replicó Lali dando un paso atrás, y el instinto protector de Peter se
puso en alerta.
Si se atrevía a ponerle
una mano encima…
—He estado esperando a
que entrases en razón —gruñó el hombre—. Dos días. Dos días, Lali, y no has
venido a disculparte.
—¿A disculparme? —repitió
ella.
—He esperado hasta que
me he dado cuenta de que no tenías intención de hacerlo.
—Me alegra que lo hayas
entendido, padre —dijo Lali irguiendo los hombros y levantando desafiante la
barbilla—… aunque hayas tardado un poco.
—¿Cómo te atreves a
hablarme así? —masculló su padre entornando los ojos y mirándola rabioso—. Esto
que has hecho no es más que un acto de rebeldía infantil.
—¿Infantil? —repitió
ella indignada.
—Y ahora vas a
escucharme —le dijo su padre meneando un dedo como si fuese un profesor
amenazando a un alumno—. Vas a recoger tus cosas, voy a llevarte de vuelta a
casa, iniciaré los procedimientos para anular este absurdo matrimonio, y a
finales de semana todo este asunto estará olvidado. El senador Amadeo me debe
un par de favores, y acelerará las cosas.
—¿Para qué, para que
pueda casarme con su hijo? —le espetó Lali apretando los puños y dejándolos
caer junto a los costados.
—Sí, tal y como habíamos
planeado —respondió su padre mirando su reloj de pulsera, como si ya hubiese
perdido bastante tiempo con aquello.
Peter apretó los
dientes. Ni el padre ni la hija se habían dado cuenta de que estaba allí
escuchándolos, y aunque quería bajar los últimos escalones para acudir al
rescate de Lali, también quería ver cuál sería su respuesta. ¿Se doblegaría a
las exigencias de su padre, o haría honor a su trato?
—No puedo marcharme —dijo
Lali en un tono firme—. No quiero hacerlo.
Su padre la miró tan
sorprendido como si hubiese lanzado un palo a lo lejos y al ordenarle a su
perro que fuese a recogerlo, éste le hubiese respondido que lo hiciese él
mismo.
—¿Cómo has dicho?
—He dicho que no voy a
dejar a mi marido.
—Tu marido… —repitió su
padre con desdén—. ¡Si ni siquiera conoces a ese hombre!
—Lo conozco desde hace
más de un mes, padre —replicó Lali, y esa vez, en lugar de retroceder, dio un
paso hacia él—. Lo conocí cuando estaba organizando…
No terminó la frase, y Peter
sonrió para sí. Obviamente no iba a confesarle a su padre que lo había conocido
cuando estaba organizando los preparativos de su boda con otra mujer. Y de
pronto se dio cuenta de que tenía razón, de que en realidad no eran completos
desconocidos porque llevaban tratándose desde hacía más de un mes. Él la había
visto trabajar, había comprobado de primera mano sus dotes como organizadora,
su habilidad para calmar a la gente en situaciones de tensión… diablos, ¡si
incluso se había defendido con uñas y dientes en las ocasiones en las que
habían tenido puntos de vista distintos respecto a los preparativos de la boda.
La mayoría de la gente no se atrevía a llevarle la contraria, y el que ella sí
se atreviera le gustaba; más aún, la respetaba por ello.
—Me he casado, padre —le
dijo al magnate—, así que vete haciendo a la idea. Peter es mi marido y va a
seguir siéndolo.
No necesitaba oír más. Peter
carraspeó, y cuando padre e hija se volvieron hacia él bajó los últimos
escalones mirando a Carlos con una sonrisa fría en los labios.
—Vaya, ¿a qué debemos el
honor de esta visita? —le dijo deteniéndose al lado de Lali.
Carlos Espósito inspiró
profundamente, y el color de su tez se tornó casi púrpura.
—Esto no es ninguna
visita.
—Entonces, ¿por qué no
me explica que está haciendo aquí, en nuestra casa, gritándole a mi esposa? —murmuró
Peter rodeando con un brazo los hombros de Lali y atrayéndola hacia sí.
Ella se apoyó en él,
como agradeciéndole su apoyo.
—He venido a poner fin a
esta charada —masculló Carlos Espósito—. Lali está prometida al hijo de un
amigo mío y voy a asegurarme de que ese matrimonio se lleve a cabo.
Peter se rió. Sabía que
aquello podía desestabilizar o irritar más aún a un oponente, pero en ese
momento le daba igual qué efecto pudiese tener. No le gustaba aquel tipo. Con
las cosas que le habían contado sobre él le bastaba para saber que no quería
tener nada que ver con él, y lo que acababa de ver y escuchar le había hecho
reafirmarse en esa opinión.
—Dado que Lali y yo ya
estamos casados, no comprendo el motivo de su visita. Está perdiendo el tiempo,
y nos lo está haciendo perder a nosotros también.
—Me parece que se olvida
de con quién está tratando, Lanzani—casi le rugió Carlos Espósito. Cuando miró
a Lali, le palpitó una vena en la sien—. Lali es mi hija y hará lo que yo le
mande.
—Te equivocas, papá —le
espetó Lali rodeando la cintura de Peter con un brazo y agarrándose a él como
si fuera un talismán—. Haré lo que me plazca. Ya no soy una niña, y no
controlas mi vida.
—¿Cómo has dicho?
Si el tono de voz de Carlos
Espósito hubiese sido más gélido, de su boca no habrían salido palabras, sino
cubitos de hielo.
Lali, sin embargo, no se
arredró, y sólo la fuerza de sus dedos apretándole a Peter la cintura le indicó
lo mucho que aquello le estaba costando.
—He dicho que no voy a
casarme con Benjamin Amadeo. Ahora estoy casada con Peter y no hay nada que
puedas hacer al respecto.
Peter le apretó el
hombro para darle ánimos, y miró a Carlos Espósito, que seguía observándolos
iracundo.
—Ahí tiene su respuesta —le
dijo—. Ya no tiene nada más que hacer aquí, así que si no le importa, creo que
debería marcharse.
Carlos Espósito frunció
el ceño y abrió los ojos como platos.
—¿Me está diciendo que
me vaya?
—Sí, creo que sí —asintió
Peter, felicitándose por estar siendo capaz de controlarse.
—Hijo de perra… si crees
que puedes…
Lali resopló exasperada.
—Padre…
Peter se puso delante de
ella y rogó que no se moviera de ahí. No quería tener que pegarle un puñetazo a
su padre, pero si finalmente se veía obligado a ello, tampoco quería que ella
estuviese en la línea de fuego.
En ese momento a través
de la puerta abierta vio llegar la camioneta de la pizzería, que se detuvo a unos
metros de la casa.
—Ha llegado la cena —dijo
Peter, y aprovechando que el señor Espósito se había vuelto para ver de qué
estaba hablando, lo agarró por el codo y lo arrastró fuera.
Al instante, sin
embargo, el hombre se revolvió y después de soltarse le lanzó una mirada de
furia apenas contenida a su hija y luego le dijo a Peter:
—Esto no acabará así.
—Se equivoca —replicó Peter,
que había tenido bastante—. Ya hace mucho que ha acabado.
Trataba con hombres
poderosos a diario, y estaba acostumbra a lidiar con su orgullo, su
prepotencia, y su arrogancia. Sin embargo, hasta ese día no había sentido el
deseo de estampar su puño en la cara de nadie.
Claro que el ver el
miedo y la indignación en los ojos de Lali, y el oír a su padre dirigirse a ella
como si fuese su patrón y ella sólo una empleada había hecho que le hirviera la
sangre.
—Márchese, señor Espósito
—masculló entre dientes para que el chico de las pizzas, que había bajado de la
camioneta, no lo oyera—. Y no vuelva a acercarse a nuestra casa ni a amenazar a
mi esposa.
El padre de Lali se
quedó mirándolo un buen rato, y Peter casi deseó que intentase pegarle para
tener una excusa y poder hacer lo mismo, pero aunque estaba hecho una furia, el
hombre se controló.
—¡Hola! —saludó el chico
de las pizzas acercándose a ellos—. ¿Alguien ha pedido una pizza?
—Sí —respondió Peter
antes de volver la cabeza hacia el señor Espósito—. ¿Le ha quedado claro?
La mandíbula del hombre
subía y bajaba, como si estuviese machacando con los dientes las palabras
enfadadas que quería soltarle.
—Muy claro —masculló.
Peter esbozó una fría
sonrisa.
—Estupendo; gracias por
su visita.
El chico de las pizzas
se detuvo a un par de pasos de ellos.
—Eh, ¿ese coche es suyo,
amigo? —Le preguntó al padre de Lali, volviendo la cabeza para mirar el
deportivo con envidia—. Es alucinante.
—Quita de en medio,
payaso —masculló Carlos Espósito empujándolo a un lado y casi tirándolo al
suelo.
—Tranquilícese, ¿quiere?
—le gritó el chico mientras el señor Espósito se alejaba. Se volvió hacia Peter
y le entregó la pizza—. Son dieciocho con noventa y cinco… sin contar con la
propina, claro.
—Ten —le dijo Peter
tendiéndole un billete de veinte.
El chico le dio las
gracias, y Peter regresó dentro con Lali.
Continuará...
mas novelaaA! me encantooo! odio al padre de lali
ResponderEliminarme encantó!!!!!!! que lindo cómo la defendió, Lali se va a sentir mucho más segura ahora :)
ResponderEliminarespero más, cuando puedas.. ;)
aaaaaaaaaawwwww amooo como peter protegee a laliii
ResponderEliminarmaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas
me encanttttta. quiero mas! ajaja
ResponderEliminarAPA se armo jajajjajaajajjajajaaj quiero maaaaaaaaaaaaaaaas !
ResponderEliminar@Pela_Teamo
Que bueno que Lali al fin lo haya enfrentado! Aunque no creo que el padre se rinda tan facilmente!
ResponderEliminarMe encanta!
Peter defendiéndola y preocupandose por ella :)
Quiero mas!
Beso
Juli♥
mas tierno pitt! uno mas y no jodemos maass! :)
ResponderEliminarmas noveeeeeee!!! es buenisimaa!!!!!! luuh!
ResponderEliminarmaaaaaasss!! :)
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarAmo amo amo tu novela ! MAAAAAS jajajaaja ♥
ResponderEliminar@ValeenLaliiteer
como dije el papa lo que me impresiona es que no le haya dicho nada de como iba a vestida por que la bata pues no es muy presentable y me encanto como peter la defendio pero creo que hubiera sido mejor desde el principio no despues de oir y me encanto que lo saco :P masss
ResponderEliminarPeter un super galán!Lali muy bien enfrentando a su padre!Y el padre de Lali odioso es poco,pero no confío en q aun se quede tranquilo!Deben consumar urgente ese matrimonio para q no pueda anularlo,JAJA igual creo q ese punto no va a costarles demasiado y menos despues de haber vivido tamaña situación.
ResponderEliminarCómo me gistaria ver q pasa ahora q se fue el padre entre ellos,q se dicen,q hacen...
masssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss
ResponderEliminarnoveeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee
ResponderEliminarMAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAASSSS! esta demasiado buena!
ResponderEliminaraaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaah!! viejo hdp!!!! ¬¬ al fin le hizo frente lali y me encanto que peter la ayudara
ResponderEliminarmaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas
ResponderEliminarMe encanta peter así de protector con lali! Más!
ResponderEliminarQue hermoso capitulo como la defendío Peter es lo ams tierno que hay MAS NOVE PLEASE
ResponderEliminarCuando subas el otro avisamen@TeeAngel_Potter
ResponderEliminarPeter la conoce más d lo k piensa,ya conoce sus valores al ser la única k se enfrentaba a el .El padre un asco,un retrogrado dl siglo 18.Bien x Lali k lo enfrentó ,pero me temo k sus eventos los hacía en la casa familiar ,y ahora su padre se lo va a impedir,para doblegarla.
ResponderEliminarq hdp el papa d lali invancablee
ResponderEliminarmasssssssssssss
no no no no tengo palabras! (genio el de la pizza que le puso los puntos)
ResponderEliminarsabia que era el papá de Lalu... bueno quiero saber como sigue esto!
un beso! seguime avisando :)
@YoSoyLalita
Muy buena seguila porfa!! :)
ResponderEliminarQué insoportable el papá de Lali, Peter más tierno defendiéndolaa!!
ResponderEliminarmás noove :)
Más lindo Peter defendiendo a Lali, es un buen esposo.
ResponderEliminarMasi_ruth
me encantaron los capítulos!!! peter es un tierno en como defendio a lali :)
ResponderEliminarespero el proximo
Awwwwwwww como la apoyooooooo <3 me muero de AMOR @LuciaVega14
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