+ comentarios = + caps . BESOS ♥
Se preguntó si había llegado siquiera a intentarlo.
Capítulo 25
A la mañana siguiente, Lali
tenía la mirada fija en la pantalla de su ordenador mientras tomaba café.
Revisó el correo electrónico y abrió un mensaje de su editor, Walter. Le había
encantado la historia de los
extraterrestres y quería más, lo cual era perfecto, pues ella ya tenía en mente otro artículo con los mismos
parámetros: alienígenas en la montaña. Al final del mensaje, Walter le avisaba de que Myron Lombardo había
telefoneado a la revista para
preguntar por su actual domicilio. Obviamente había descubierto que ella ya no estaba en su apartamento, lo cual también daba a entender que él había violado
la orden de alejamiento.
Lali decidió no hacer nada por
el momento. No estaba preocupada. No había modo de que Myron la encontrase. Ni
en cien vidas se le ocurriría ir a buscarla al agreste Idaho.
Dejó la taza de café en la mesa y puso manos a la
obra. Empezó a teclear furiosamente y en
mitad de la página se detuvo. La imagen
de Peter a su espalda, abarcándole los pechos con las manos, se coló en su cerebro y la paralizó.
Intentó apartar ese recuerdo y
volver al trabajo, pero no pudo. Peter estaba presente y había llegado
para quedarse, bloqueando su flujo creativo.
Sólo podía hacer una cosa.
Esperar a que se esfumase. Abrió una
cajita y sacó un frasquito de esmalte para uñas y una bolsa de plástico con bolas de algodón. Se cortó las
cutículas y se pasó la lima, y luego se pintó las uñas de tono malva porque su
estado anímico le pareció de ese
color. No era brillante y alegre, pero tampoco oscuro. A medio camino entre uno y otro, con un matiz de
incertidumbre. Como su propia vida.
Mientras se pintaba las uñas,
fue repasando la información que había recopilado sobre Hiram Donnelly. Por lo
que parecía, al viejo sheriff le iba el rollo
de la dominación y la sumisión. Durante
el día era un maniático del control, pero por la noche le gustaba que lo
dominasen. Por lo que había leído, el sadomasoquismo no era tan infrecuente como pudiese creerse. De hecho, poderosos hombres y mujeres son los principales
clientes de exitosas dominatrices.
También leyó varios informes y
teorías que intentaban explicar por qué a ciertos
hombres les atraía ser dominados, pero escribir un artículo sobre psicología y patología de los fetiches no
era lo que ella pretendía. Estaba mucho más interesada en el hombre que había conseguido ser elegido sheriff en
un pueblo conservador durante veinte años seguidos, mientras en secreto se dejaba llevar por desviaciones sexuales que
acabaron consumiéndole.
Cuando las uñas se le secaron,
salió de casa y fue a ver a Rochi. Gas le dijo que Rochi estaba
dormida pero que no tardaría más de un par
de horas en despertarse, así que podría volver a eso del mediodía. Dado que sólo eran las diez, Lali
disponía todavía de un buen rato para
pintarse también las uñas de los pies. Pensó en los alienígenas de su artículo y en las muchas posibilidades que tenía para futuras historias. Pensó en hojear
algunas revistas antes de escribir su artículo sobre Hiram Donnelly,
aunque también podía escribirlo primero.
Pero principalmente ocupó el tiempo
pensando en Peter y en lo que le había dicho sobre lo de llevar una vida
de monje. No podía imaginar a un hombre como él
en una celda monástica.
Pensó en cómo la había mirado, el deseo que había
visto en sus ojos y la gravedad de su voz,
una voz que la envolvía y le daba calor. Intentó interpretar sus
sonrisas, sus palabras, sus caricias. Le gustaba creer que Peter se preocupaba
por ella, siquiera un poco, pero no estaba convencida. Y lo cierto era que,
aparte de que le gustaba y de la atracción
física que ejercía sobre ella, Lali no sabía exactamente cómo se sentía
al respecto. Más allá de la soledad y la mutua atracción que sentían, no podía
decir que tuviesen nada en común. Ni
siquiera sabía si lo vería ese día o al siguiente o no volvería a verlo hasta pasada una semana.
¿Quería ella algo más? ¿Y él?
Pensó en su ex mujer. Si
realmente era camarera, ¿por qué Adam no
podía hablar de su trabajo?
¿Tal vez porque era una
camarera topless?
Una de esas mujeres que trabajan en clubes sólo para hombres. Eso explicaría por qué Peter
no quería que su hijo hablase del tema. Los pequeños pueblos suelen ser poco tolerantes respecto a ciertos asuntos.
A mediodía, Lali llamó a la
puerta de su vecina y Gas la condujo al salón, donde Rochi
estaba sentada en un sillón ataviada con
una bata azul. Se había recogido el pelo en lo alto de la cabeza formando una especie de fuente rojiza, y tenía
vendada la mano, dejando visible únicamente la punta de los dedos. Debido
a los analgésicos y a la falta de sueño,
parecía un poco aturdida y apagada. Lali
se ofreció a hacer la comida pero ella se negó. Sin embargo, se fijó en
las uñas de Lali y le pidió que le hiciese la manicura.
Cuando Gas se retiró para echar
una cabezadita, Lali fue a su casa en busca de su
neceser. Cuando regresó, se sentó en un taburete bajo junto al sillón de Rochi y, tras acondicionarlo todo con cuidado, le cortó las cutículas de los diez
dedos. Mientras convertía las uñas de Rochi
en perfectas lunas crecientes, la escuchó hablar sobre el drama
por el que había pasado la noche anterior.
La casa estaba sumida en un inusual silencio y Lali se preguntó dónde estarían Wally y Adam.
-¿Cómo se comportaron los niños
anoche? -preguntó finalmente Rochi, y se acarició
la hilera de uñas con los dedos de su mano
buena.
-Muy bien, pero les gusta pelearse entre ellos
-respondió Lali. Sopló sobre los dedos de Rochi
y añadió-: Y se tiraron pedos.
-Sí, los niños hacen esas
cosas. -Rochi vio un bote de esmalte
rosa y se lo señaló a Lali-. Ése me gusta. Parece un color que podría elegir una buscona.
No era cierto, pero Lali no
quiso discutir.
-¿Dónde están Wally y Adam?
-Peter ha pagado a una de las chicas Raney para que
cuide de ellos
en su casa hoy. Pensó que así yo podría descansar.
-Muy atento de su parte. -Lali tomó un bote de esmalte transparente-.
Supongo que él también estará cansado –dijo mientras extendía la base sobre las uñas de Rochi.
-Qué va, no creo que se fuese
a casa muy tarde.
Bien que lo sabía Lali, pero
se concentró en el pulgar de la mano
herida de Rochi.
-¿O sí?
-¿O sí qué?
-Si se fue tarde a casa. Gas me
dijo que los gemelos llegaron al hospital a eso de las
diez y media. Así que Peter debió de llegar al pueblo más o menos una hora más
tarde. Después de recoger a los niños,
probablemente llegó a su casa a las doce menos cuarto.
Podría haber llegado
perfectamente a esa hora, si no hubiese empezado a besarla en el cuello y la boca, y si no se le hubiese ocurrido acariciarle el vientre ni quitarle la
camiseta. Lali no alzó la mirada y dijo con
fingida indiferencia:
-Supongo que sí.
Cerró el bote de esmalte
transparente y luego agitó el botecito de rosa para busconas.
-¿Qué ocurrió? -preguntó Rochi.
-Nada.
-Entonces ¿por qué actúas como
si hubiese pasado algo?
Lali alzó la mirada.
-Yo no actúo de ningún modo.
-Claro
que sí. Todo el Percodan que me han dado me ha aturdido un poco, pero no me ha dejado ciega. -Rochi frunció sus
cejas-. Además, vi cómo os separabais de un brinco cuando Gas y yo entramos en la cocina. Me herí en la mano, no en los ojos. ¿Qué estabais haciendo?
-Hablar.
-Sí, claro. Yo creo que le
gustas.
Lali se encogió de hombros y
pintó las uñas de la mano buena de Rochi.
-Yo creo que Peter flirtea con
todas las mujeres...
-Sí,
es cierto. Lo ha hecho siempre, desde el colegio, pero contigo habla de un modo diferente que con las demás.
-¿Cómo?
-Cuando habla contigo te mira
la boca.
Lali tuvo que morderse el labio
para no sonreír. No se había percatado de eso. Bueno, tal
vez un par de veces.
-Así pues, ¿de qué va la cosa
entre vosotros?
La última vez que Lali había
hablado de su vida sentimental con una amiga, ésta había
usado la información para robarle a su
marido. Sabía que Rochi era diferente, y además nada de lo que pudiera contarle iba a depararle daño alguno. No
estaba enamorada de Peter, y él no lo
estaba de ella.
-No es nada -respondió, lo cual era básicamente
cierto.
-Pues te aseguro que no parece
que sea nada. ¿ Ha usado sus viejos trucos contigo?
-¿Viejos trucos?
-Sí. En octavo, solía fingir
que le picaba algo en la pantorrilla para así rodearle la cintura a una chica
y hacer ver que simplemente se sostenía mientras
se rascaba.
Lali rió.
-Nada de picores.
-Supongo que tendría que
advertirte de ciertas cosas de Peter.
-¿Por qué, qué tiene de malo?
-Nada. Pero se le ha metido en
la cabeza que no puede mantener una relación con una mujer. Dice que tendrá
que esperar a que Adam se haga mayor. Pero
por el modo en que te mira...Bueno, no lo veía mirar así a
una mujer desde hacía mucho tiempo.
Desde que iba a ver correr los cien metros lisos a Kimberly Howe. –Rochi se detuvo para soplarse las uñas y
después tendió muy despacio hacia Lali la
mano herida-. Debes admitirlo, tiene mejor pinta que la
mayoría de niñatos que salen en las revistas de moda, y no a todos los hombres
les sientan tan bien los vaqueros como a él.
Eso era cierto.
-Gas no tiene culo -añadió Rochi.
Lali también se había fijado.
-Si Peter es tan estupendo, ¿por qué no te casaste
con él?
Rochi arrugó la nariz. -No hay duda de que mirar a Peter es como contemplar
una obra de arte, pero que una pueda
contemplar un cuadro hermoso no significa que quiera
tenerlo en el salón de su casa. -Sacudió la
cabeza y añadió-: Yo supe que quería a Gaston Dalmau en cuanto lo vi en primer curso. Me costó diez años cazarlo, pero aunque Gas se largase mañana mismo, Peter nunca me
interesaría en ese sentido. Nos
conocemos desde hace mucho tiempo, y su
modo de hacer las cosas me vuelve loca.
-¿A qué te refieres?
-Sólo lava la ropa cuando la
tiene toda sucia. Apoya las botas encima de la mesita del
café, y es poco menos que un milagro
que Adam y él coman verdura. Peter cree que si comes un plátano o una manzana por semana, ya no necesitas
comer verdura.
Lali acabó de pintar las uñas
y se relajó mientras esperaba a que se
secasen.
-Adam parece sano y feliz.
-Sano sí. -Rochi observó su
mano herida-. Se va este viernes con su madre. Cuando
vuelve siempre está un poco raro.
-¿Raro en qué sentido?
-Un poco introvertido y también
algo triste. Está convencido de que si su madre y su
padre pasasen un tiempo juntos, volverían
a ser felices. -Rochi se encogió de hombros-. Supongo que es normal.
-¿Cuánto tiempo suele estar
fuera?
-Dos semanas, pero le cuesta un
mes entero acostumbrarse de nuevo a la rutina. No
conozco a la madre de Adam, pero debe de
ser muy indulgente con él, porque cuando vuelve, duerme hasta muy tarde y no tiene ganas de nada.
Lali se moría de ganas de
preguntarle todo lo que supiese sobre
la ex de Peter, pero no quería que Rochi descubriese su interés.
Incluso aunque fuese capaz de compartir con ella sus sentimientos, era demasiado pronto y su amistad era demasiado reciente
para contarle la mezcla de emociones que se arremolinaban en su interior
cuando Peter le sonreía.
Lali echaba de menos sentarse
a charlar con otras mujeres sobre la vida, los hombres y el
sexo. Echaba de menos esas conexiones
que requieren tiempo para establecerse. Una profunda conexión con alguien que entiende las injusticias perpetradas contra las mujeres y al mismo tiempo el mal trago
que supone ir a ver a tu novio del instituto si no has podido
peinarte decentemente. Echaba de menos
discutir sobre temas fundamentales como la sanidad, la paz en el mundo, las
rebajas en la zapatería Neiman's y si
el tamaño importaba o no.
Quería volver a disfrutar de
eso. Y hablar sobre la confusión que
sentía, sobre sus sentimientos y su vida. Quería contarle a Rochi por qué le costaba tanto hablar de sí misma,
por qué le costaba confiar en una amiga.
-¿En qué historia para tu
revista estás trabajando ahora? -preguntó
Rochi después de bostezar.
La oportunidad de intimar pasó de largo, y Lali
buscó la mano buena de Rochi.
-Alienígenas que se hacen
pasar por humanos en un pueblo de
montaña -dijo, dispuesta a aplicar la segunda capa de esmalte-.
Se burlan de los turistas.
Rochi abrió mucho los ojos.
-¿Estás escribiendo sobre
Gospel?
-Un pueblo parecido a Gospel.
-¡Oh, Dios mío! ¿Puedo ser una de las alienígenas?
Lali
miró a su nueva amiga, con el pelo recogido en lo alto de la cabeza y los ojos muy abiertos, y sonrió.
Habría sido una estupenda alienígena.
-Lo siento, pero desde el
asunto de Myron no escribo sobre gente
real.
-Vaya suerte la mía.
Mientras Lali le soplaba las
uñas, se miraron a los ojos. Posiblemente no era el mejor momento para preguntarle sobre los Donnelly. Estaba aturdida por la medicación y la lengua se le trababa ligeramente, pero tal vez unas pocas preguntas no hiciesen daño a nadie. Si a Rochi le incomodaba que le preguntasen sobre sus
antiguos vecinos, Lali no la presionaría.
-¿Conocías bien a Minnie
Donnelly? -le preguntó.
-¿Por qué lo dices?
Dado que ya no era un secreto y
la mitad del pueblo estaba al corriente, repuso:
-He pensado escribir un
artículo sobre lo que le sucedió al viejo sheriff.
Rochi parpadeó y frunció el
entrecejo.
-¿Para el Weekly News of the Universe?
-No. Intentaré publicarlo en
alguna revista importante. -Le habló a Rochi de sus ideas y cuando le explicó que no estaba interesada en escribir un artículo morboso sobre perversiones sexuales, su amiga se relajó lo bastante para hablar.
-Hiram podía comportarse como
un auténtico hijo de perra, y a mí no me caía muy bien.
Aun así, odiaría ver expuesta su vida
sexual sólo para vender más revistas -dijo-.
Su vida fue mucho más de lo que acabó siendo.
Hubo algo más que putas y clubes sexuales y
pornografía. Pregúntale a cualquiera del pueblo y cada uno te contará una historia diferente sobre él. También te dirán que él medía a todo el mundo por
el mismo rasero. -Le contó que Minnie siempre había
sido maniática del control-. Todo el mundo creía que era una santa, pero yo vivía aquí
y sabía que llevaba su casa con puño de
hierro. Sus gritos se oían cada dos por tres. No me extraña que sus hijos se fuesen y no
volviesen jamás. Ni que, tras su muerte, Hiram se sintiese perdido sin nadie que lo maltratase.
Lali tomó con cuidado la mano
herida de Rochi y aplicó otra capa de esmalte a las
uñas.
-Pareces compadecerlo.
-Diablos, no. Era demasiado
pervertido para compadecerlo. Al final, pagaba por
chicas que apenas acababan de cumplir
los dieciocho. No siento lástima y tampoco lo entiendo, pero analizo la situación y sé cómo sucedió. Al verse
libre del yugo de Minnie, se descontroló.
-Hace unas semanas me dijiste
que Hiram empezó a ser descuidado y que traía las
chicas a su casa. ¿Viste alguna vez algo sospechoso?
-No. -Rochi levantó la mano
vendada y se miró las uñas-. ¿Cuándo vas a escribir ese
artículo?
Lali no la creyó, pero no
insistió.
-Estoy esperando un informe del
FBI. Una vez lo haya leído, tendré claro cuándo
empezar a escribirlo -respondió. Pero
antes tenía que acabar la historia que le habían encargado, tenía que pensar en extraterrestres y no en vaqueros
de voz suave-. Espero que podáis
enseñarme esas cascadas de las que me hablasteis Gas y tú. Me gustaría tomar algunas fotos para mi próximo artículo. -Se encogió de hombros-. Pero
esperaré a que te recuperes.
-Pídele a Peter que te lleve. Sabe dónde es, pero
pídeselo antes del viernes, porque siempre
se va de Gospel cuando Adam no está.
–Rochi se reclinó en el sillón-. Se va al Doble T a ayudar a su madre y su cuñado. Si no se lo pides a
tiempo, lo más probable es que no
vuelvas a verlo hasta dentro de dos semanas.
Dos semanas. Durante quince días
no tendría que preocuparse por encontrárselo o
pensar en el lento roce de sus manos o su ávida manera de besar. Dos semanas eran el tiempo que ella necesitaba para aclarar sus pensamientos y
concentrarse en el trabajo, que había sido la razón
de establecerse en Gospel. Ahora que su carrera
volvía a encauzarse, necesitaba concentración y cabeza fría. Pero de repente dos semanas le parecieron muchísimo tiempo.
Continuará...
ME ENCANTO ME ENCANTO
ResponderEliminarLALI Y ROCHI ESTAN EMPEZANDO UN ABUENA AMISTAD
BESOS
@DaniiVasqueez
Rochi ya noto la atraccion q existe entre lali y peter!
ResponderEliminarDos semanas es muchísimo tiempooooo! Aunque si es tiempo bien aprovechado se pasará volandooo! jajaja un día los dos solos perdidos por esas cascadas y se le van a ir las tonterias de ser monjes y a la otra de tantos alienígenas jajaja
ResponderEliminarEspero más hoy! para irme con buen recuerdo mañana (A) Besitoooos!
hay me huele a amor en puerta ja
ResponderEliminarquiero massssssssssssss
ojala se llene rapido asi volves a postear
beso
Ojala que Peter se quede con/por Lali. jaja me encanto! maaas
ResponderEliminarMas nove a ver si peter la lleva a las cascadas y que pasara?
ResponderEliminarBUENISISISISIMOOOOOOOOOO
ResponderEliminarrochi no es bldaa.
mas nove
Subi otro
ResponderEliminarMe encanta la amistad que estar armando lali y rochi !!
ResponderEliminarespero más
besos
mE ENCANTA MAS
ResponderEliminarQUIERO LALITER SJFNKSLDJF
DALE DALE, subite otro juli!!!! quiero laliter!!! @ConEllosSiempre
ResponderEliminarmas mas quiero mas (8)
ResponderEliminarOTRO OTRO OTRO OTRO DALE SUBÍ MAAAAAAAAAS!
ResponderEliminarME ENCANTAAAA AMO ESA AMISTA Y AMARE LAS CASCADAS! ESTA BUENISISISISISMAAAAAAAAA SUBI OTRO RAPIDO DALE!
ResponderEliminarsubi otro, me encanta tu nove :)
ResponderEliminarSin Adam ,uyyuyuy,puede pasar d todo.
ResponderEliminarAwwwwwwwwww Lali lo va a extrañar mas tierna!!!!!!! @LuciaVega14
ResponderEliminar